¿Cómo educar a un perro para que no muerda?
En cuanto llegan a casa, los perros se convierten en parte activa de la familia. Como recién llegados, deben explorar para conocer el lugar donde se sentirán a gusto y a salvo por ser su hogar. Esto puede originar que desarrollen el hábito de morder, por lo cual es importante que sepas cómo educar a tu perro para que no muerda.
¿En qué consiste la educación canina?
Toda persona que haya tenido una mascota sabe que la educación es fundamental, pues con sanos límites y utilizando técnicas comprobadas, puedes sentar las bases de lo que será el comportamiento del animal dentro y fuera de la casa.
La falta de aprendizaje o no haber impuesto un método de educación correcta, con reglas claras y coherentes, repercutirá en todas las actividades diarias que un perro lleve a cabo.
Lo más recomendable es comenzar con la educación canina cuanto antes, mientras más joven sea el perro, mejor. Un cachorro aprende más rápido que un perro ya adulto y en los mayores es más complicado conseguir buenos resultados.
Si desde pequeño le ofreces la guía necesaria para premiar conductas aceptables y de forma cariñosa, le harás saber que hay cosas que no debe hacer. El proceso no tiene que ser traumático, solo ármate de paciencia y prepárate para asumir el reto.
¿Por dónde empezar?
Existen fundamentos básicos que le dan al perro la guía necesaria para que sus acciones no generen todo un caos. Es imposible pretender que el comportamiento del perro sea perfecto, pero con la educación correcta, aprenderá buenos hábitos.
Al perro se le debe enseñar cuáles son sus espacios, a no subirse en muebles ni morder o destrozar ciertos objetos que están totalmente prohibidos para él.
El dueño de la mascota debe proveerle al perro todo lo que este necesite para aprender, como por ejemplo un lugar para hacer sus necesidades, asearse y comer.
Los límites deben estar claros. Es inaceptable que el perro muerda a otras personas o ladre constantemente, este tipo de reacciones deben ser corregidas de inmediato.
Las mascotas deben ser educadas para que se relacionen de manera amigable con otros perros, con los niños y no morder todo lo que se encuentren a su paso, solo pueden tomar los juguetes que tienen permitidos.
Investiga las costumbres de su raza
Conocer al perro es una de las claves para conseguir una educación adecuada. Para tener una buena relación con tu amigo canino, es necesario que conozcas las características de personalidad y salud típicas de sus pares.
Por ejemplo, puedes observar cómo se comportan tradicionalmente los perros de su misma raza. Si son de naturaleza nerviosa o malhumorada, si son particularmente activos a determinada hora del día o necesitan ejercicio constante para sentirse tranquilos el resto de la jornada.
Cuanto más conozcas su personalidad, más fácil será educarlo, ya que puedes aprovechar las horas del día en que se encuentre más relajado para enseñarle algunos modales y hacerle entender ciertas restricciones.
¿Cómo educar al perro para evitar que muerda?
Uno de los comportamientos más frecuentes en los perros cuando están cachorros, es que sienten la necesidad de morderlo todo. Esto es un problema, pues cuando un perro tiene esta costumbre suele destruir los zapatos, muebles, bolsos y otros objetos de valor.
Morder sin control es un comportamiento que debe ser corregido pronto, debes educarlo para que no muerda mientras siga siendo un cachorro, pues con la edad puede ser que se dificulte un poco este tipo de aprendizaje.
¿Por qué mi perro lo muerde todo?
Hay muchas causas por las cuales los perros suelen morder. Algunas obedecen a cambios o trastornos que se presentan en las mascotas y dan origen a este tipo de comportamiento, pero si se corrige a tiempo, no se convertirá en un mal hábito.
Malestar por la dentición
En sus primeros años, los perros sienten el impulso de morder debido al brote o reposición de piezas dentales, pues de forma similar a los humanos, ellos sienten molestias cuando pasan por este proceso.
Si se trata de un trastorno por el cambio de dentición, una solución práctica es ofrecerle un juguete especial, elaborado con un material que pueda morder a su antojo sin dañar sus dientes ni sus encías.
Los juguetes para perro existen en infinidad de tamaños, colores, con sonidos y hasta sabores. Eso debes escogerlo a tu gusto, pero siempre debes tomar en cuenta que la forma del juguete sea diferente a los objetos que tienen prohibido tomar.
Con esto le enseñas los límites y el respeto que debe tener ante cosas que no son suyas y lo ayudarás a asimilar el proceso de educación más fácilmente.
Necesita más cariño y comprensión
La ansiedad, tristeza o exceso de energía, son causas que comúnmente desencadenan episodios donde lo único que hace el perro es morder. Si tu mascota se siente sola en casa, el nerviosismo por la espera de que regreses le impulsará a morder todo lo que consiga a su paso.
En este caso, la solución se basa en planificar juegos que lo estimulen durante el día. Un perro que se sienta relajado y físicamente cansado, no estará motivado a ir por la casa buscando qué encuentra para morder.
El punto es disfrutar al máximo con tu perro, llevarlo a dar un paseo, correr con él, dejarlo que juegue e interactúe con niños y con otras mascotas le hará bien.
Debes comprender que a veces las mordidas son para llamar la atención de su dueño, porque no es suficiente con los juguetes que tiene para entretenerse o simplemente le gusta explorar el entorno y hay áreas de la casa que le causan curiosidad.
En cualquier caso, debes premiar el comportamiento adecuado. Si está tranquilo, acarícialo, refuerza y hazle saber que siempre lo vas a querer y cuidar mucho.
Tips para corregir esta conducta
Debes ser comprensivo y tolerante, pero solo hasta cierto punto. Si notas un comportamiento inapropiado en tu mascota, debes hacer lo posible por eliminarlo de inmediato, pues mientras más pase el tiempo, más difícil será.
Debes ser firme y claro en tus órdenes, si lo ves mordiendo algún objeto que no sea su juguete, debes decirle “NO” con seriedad, para que tu perro lo tome como señal de desaprobación.
Ponte de acuerdo con otros miembros de la familia para que todos colaboren en la educación del perro, de forma consciente y ordenada, de manera que la mascota no se confunda porque algunas veces se le corrija y otras no. Mientras dura el entrenamiento, la orientación debe ser continua.
Si notas inquieto a tu perro, ofrécele su juguete preferido, para que lo vea como opción para descargar la ansiedad.
No le ofrezcas zapatos ni medias viejas, pues el animal no sabe la diferencia entre un elemento inservible y otro recién comprado, con este tipo de objetos se confundirá y no progresarás con el entrenamiento.
Recompénsalo cada vez que lo veas masticando su juguete. Si debes ausentarte de casa y dejarlo solo, asegura el área donde el perro vaya a tener acceso y coloca los objetos que no quieres que muerda fuera de su alcance.
En resumen, los perros necesitan que sus dueños los conozcan para que puedan orientarlos. Con amor, paciencia y constancia, podrás educar a tu perro para que su comportamiento sea más adecuado.
Recuerda siempre que los perros son el mejor amigo y el compañero más fiel, solo necesitan muestras de afecto y cariñosa atención.